viernes, 16 de noviembre de 2012

Santo Tomás y los heridos de la huelga

El conocido episodio del Evangelio en el que Tomás necesita ver las heridas de los clavos y meter el dedo en el costado de Cristo para creer en su resurrección nos dice que, a continuación, éste le reprocha su falta de fe. Por mi parte, creo que nadie podría culparme por no tener fe en el gobierno de España después de todos los engaños del último año. Y lo cierto es que cuesta creer algunos números que se dan desde el Ministerio del Interior en torno a la reciente Huelga general del 14 de noviembre.

Me llama la atención especialmente el dato oficial de heridos: 77 heridos, siendo 43 de ellos miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Es decir, según nos dice el Ministerio del Interior hay más heridos entre esos antidisturbios que visten casco, botas y, en muchos casos, chaleco, escudo y protecciones rígidas (y que además van armados con porra o escopeta de pelotas de goma) que entre los manifestantes vestidos con ropa de calle. Esto me parece raro, pero como no quiero asumir que una vez más pretendan tomarnos por tontos sin hacer comprobaciones, busqué en la red imágenes de heridos en la jornada de huelga, especialmente policías. Entendía que dada la amplia mayoría de medios de comunicación abiertamente opuestos a la huelga, no sería difícil encontrar en la red imágenes de esos agentes de orden público lesionados, para demostrar así la brutalidad de los huelguistas.

Pues bien, únicamente soy capaz de encontrar dos fotografías de un mismo antidisturbios en la plaza de Cibeles que parece lesionado en una pierna.

El único agente herido más del que se tienen imágenes es un miembro de la policía autonómica catalana atropellado por un furgón conducido por sus compañeros.
Incluso hay un video de los instantes que rodean el atropello, aunque no es de mucha calidad.

Pero es que aún yendo al video colgado por el propio Ministerio del Interior para mostrar los disturbios que se dieron en el centro de Madrid a última hora, lo más cercano a una posibilidad de lesión de un policía que se puede ver en ellos es el tropezón y caída de un agente de policía en el minuto 1:43, cuando corría tras algunos manifestantes porra en mano.


Este par de casos de un agente que cojea y otro atropellado por sus compañeros es todo lo que pude encontrar. Ni el ABC, ni la Razón, ni El Mundo, ni la Gaceta, ni Libertad Digital, ni Intereconomía, ni ninguno de los otros medios interesadísimos en mostrarnos huelguistas salvajes y violentos fueron capaces de conseguir ni una foto de policías claramente heridos. 

¿Será que es difícil estar en el momento adecuado y no hay fotos de heridos de ningún tipo? Buscando fotografías de situaciones similares a las de los antidisturbios podemos encontrar la siguiente de un señor herido leve sentado en el suelo y siendo atendido por sus compañeros en los piquetes de Mercamálaga o la de un periodista ayudado a caminar por otros y herido por un pelotazo. El joven, según cuentan, sufrió una contusión en el pulmón.


Si, con un criterio similar, contabilizamos a las personas que están siendo atendidas por los servicios de emergencia, encontraremos fotografías como las siguientes tomadas en Madrid. Evidentemente, si el SAMUR tuvo que atenderles sería porque algo les pasaba.


Incluso también podemos contabilizar a personas atropelladas entre los huelguistas, como el caso de dos miembros de un piquete en Toledo atropellados por un conductor que no quiso detener el coche. Ellos se quejan la pasividad de los policías presentes cuando ocurrieron los hechos.


Otras imágenes en las que quedan claras las lesiones de algunos de los atendidos por los servicios sanitarios son las de estas dos personas que recibieron golpes de porra en los brazos y costados. Las consecuencias son evidentes.


Seguimos por las imágenes más corrientemente vistas como pruebas de lesiones: aquellas en las que aparece sangre. En la parte superior tenemos a dos detenidos en Madrid, si obviamos la sangre en la boca de la persona de la izquierda, la brecha en la cabeza del otro detenido es bien clara. En la parte inferior aparecen, por orden: el niño de 13 años que recibió varios porrazos en Tarragona, un miembro de un piquete de la CNT en Aranjuez y un manifestante de Valencia tendido en el suelo, todos con abundante sangre en la cabeza.


Si vamos a las lesiones más graves, tenemos la pérdida de visión de un ojo de una señora en Barcelona (sería el segundo ojo que se llevan por delante las pelotas de goma este año, además de la vida de un hombre) y la fractura del tabique nasal y del pómulo izquierdo de un señor en Murcia . Las mentiras del delegado del gobierno murciano sobre el herido con fracturas en la cara son desenmascaradas en un vídeo publicado por el periódico La Verdad de Murcia.


En cualquier caso, estamos obviando todos los videos en los que podrían contabilizarse la mayor parte de los golpes de porra y muchos de los pelotazos de los antidisturbios como lesiones en forma de magulladuras de importancia. También hay bastantes imágenes como las siguientes que pueden ser susceptibles de acabar con heridos, pero, sin confirmación de lesiones, no las contabilizaré.


En resumen, a pesar de que desde el Ministerio del Interior nos dicen que hay más policías heridos que huelguistas, un ejercicio simple de búsqueda de pruebas parece decirnos lo contrario. Sólo encuentro 2 pruebas de agentes lesionados (uno de ellos por sus propios compañeros) mientras que los manifestantes lesionados que puedo encontrar con una búsqueda sencilla son, al menos, 14. Este no pretende ser un trabajo científico, ni pretendo hacer una extrapolación estadística basándome en fotos de internet, pero creo que es bien significativo de que, o bien nos están mintiendo una vez más o bien en la gran mayoría de medios, que están deseosos de mostrar el salvajismo de los huelguistas, hacen muy mal su trabajo.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Kant y la huelga

¿Reconoce usted que la reforma laboral sólo ha servido para facilitar el despido y eliminar derechos a los empleados, iniciándose así un descenso de salarios y empeoramiento de condiciones laborales?
¿Reconoce que la total prioridad que se da al pago de la deuda pública y los intereses de la misma (incluida en la constitución mediante pacto PP-PSOE) significa que el derecho de cobro de los bancos acreedores está por encima de los derechos de los ciudadanos a recibir servicios básicos?
¿Ve usted que los recortes en servicios públicos básicos afectan principalmente a los más desfavorecidos? ¿Se da cuenta de que, además, estos recortes envían al paro a muchos empleados públicos y menguan los salarios de los que conservan su puesto?
¿Es capaz de ver que todo lo anterior, junto con la subida del IVA, hace que la gente pueda consumir menos, haciendo que el mercado interno del país se resienta y cierren a su vez muchísimas empresas que dependen de dicho consumo?
¿Sabe que el apoyo público a la investigación y el desarrollo se ha reducido de manera continuada desde 2009 y el recorte más brutal fue el de este año?¿Es consciente de que la salida por la que quieren llevarnos es la de las exportaciones baratas, que implican una reducción de salarios para poder competir con China y similares países y, por tanto, conducirá a un empobrecimiento generalizado de la población?

Si a usted le parece bien todo esto que está sucediendo, no haga huelga.

Si no está de acuerdo con estas medidas debería hacer huelga. ¿Por qué?:

Porque si TODOS los trabajadores hiciesen huelga y el resto de la población la apoyase, de una manera o de otra acabarían cambiando las políticas que nos llevan al empobrecimiento en nuestro país o incluso en la UE. Por tanto, una acción conjunta de todos tendría un resultado seguro.

El imperativo categórico, base de la moral humana, nos dice que "debemos obrar de modo que podamos desear que la máxima de nuestra acción se convierta en ley universal". Entonces, la cosa está clara: si deseamos cambiar las políticas actuales, debemos hacer huelga. Dado que una huelga total sería, sin duda, efectiva, si queremos alcanzar el objetivo deberíamos también querer que se consiguiese esa huelga generalizada. Por tanto, según el imperativo kantiano, debemos hacer aquello que desearíamos que todos hiciesen, así que a la huelga habrá que ir.

martes, 2 de octubre de 2012

Los antidisturbios el 25S

Todos hemos podido ver imágenes los últimos días de la actuación de los antidisturbios para disolver la concentración del 25S. De acuerdo a las que pude contemplar, creo que en muchos momentos la actuación de la Unidad de Intervención Policial en Madrid puede ser calificada de lamentable. Me parece que sería deseable un mayor ejercicio de autocrítica por parte de los representantes policiales. El compañerismo mal entendido en los cuerpos de seguridad puede derivar en un corporativismo que en algunos casos acaba defendiendo lo indefendible y disculpando conductas impropias, cuando no ilegales. A mi no se me ocurriría defender a compañeros de profesión que incumplan sus obligaciones o mantengan una conducta impropia sólo porque trabajan en lo mismo que yo, de hecho se pueden llegar a manchar la imagen de todo un colectivo si se da la impresión de que todos los compañeros están de acuerdo con esa forma de obrar.

Para ilustrar todo esto, algunos videos:

Primeros porrazos de la tarde: unos tipos empiezan a mover las vallas que cortan la calle y los antidisturbios entran en acción. Como puede verse en el video, el perfil y la actitud de mucha de la gente que está recibiendo los golpes parece que no encaja con el de los violentos manifestantes que nos vende la propia Libertad Digital TV (que es la que grabó el video). Si bien algunos plantan cara a los policías, los golpes llueven sólo de un lado. Los palos empiezan a partir del minuto 1.
Se hace de noche y llega el momento más repetido en todos los medios para justificar las cargas. Un grupo de unas veinte personas con sudaderas y capuchas negras, enarbolando banderas rojas y negras, sin ningún tipo de distintivo más, monta un numerito para provocar a la policía. A partir de ahí se suceden las otras situaciones, disturbios y actuaciones policiales que aparecen en el video.

En concreto, otra escena que apareción en los medios muchas veces para dejar clara la violencia de los manifestantes fue la de los golpes y empujones que recibió un policía. En la escena completa (min 1:10) se ve que el agente antidisturbios había golpeado a una pareja justo antes y, por alguna razón que no comprendo, unos instantes después, cuando los ve abrazados cojeando, los tira al suelo para detenerlos. Es entonces cuando varios manifestantes atacan al policía, al que acaban derribando.

Por otro lado, la más que discutible actuación dentro de la estación de tren puede verse a partir del minuto 5:50 en el video anterior. La vergonzosa intervención de los vigilantes jurados, jugando a antidisturbios por un día, se puede observar en este otro video:
Probablemente las imágenes que me dejaron más claro que los antidisturbios habían cometido excesos fueron las siguientes. En ellas se ve una violencia injustificada contra una fila de manifestantes que no hacen nada sino obedecer como ovejas y desalojar la zona que les indican. El primer minuto deja bien claros los métodos utilizados contra una gente que, una vez más, no da el perfil de peligrosos y violentos alborotadores. Incluye la detención de un individuo de mediana edad con métodos, al menos, discutibles. A partir de ese instante, puede verse que el objetivo de los antidisturbios era desalojar la zona intentando que la gente echara a correr ante los porrazos indiscriminados. Creo que de ninguna manera el trabajo de estos señores del video puede calificarse de "ejemplar". Seguramente soportaron insultos y tenían ganas de irse a casa ya, pero eso no justifica su forma de actuar.
También ha dado que hablar el tema de los policías infiltrados entre los manifestantes, ocho, en concreto. Unos cuantos de esos ocho son identificables en las imágenes, y todos van vestidos una sudaderas de capucha negra. Esa indumentaria es igual que la de la mayor parte del grupo de las banderas rojas y negras que provocó la segunda carga policial y que derivó en  disturbios y en la disolución final de la concentración. Dicha coincidencia en la vestimenta hace pensar que la mayor parte de los infiltrados lo estaban precisamente en ese grupo de apenas veinte personas que se enfrentó a la policía. Como puede verse en las imágenes, justo después de la actuación de los de las banderitas entran en acción los infiltrados (ver minuto 2:50 del video siguiente) y comienzan a generalizarse los palos para disolver a la gente. Creo que un ejemplo de actitud impropia de los antidisturbios es la carga indiscriminada del minuto 4:55, en especial llama la atención la actitud del funcionario que actúa como un enajenado en el instante 5:10.
Si bien no hay ninguna prueba de que fuesen precisamente los policías infiltrados los que provocasen activamente la carga, su acción plantea algunas dudas a partir de la difusión de estas otras imágenes:

En ellas puede verse cómo dos agentes de incógnito y encapuchados detienen a otros dos individuos. Los tiran al suelo forcejeando para inmovilizarlos y uno de ellos grita muchas veces "soy compañero" para identificarse rápidamente como policía infiltrado antes de que lleguen los uniformados con sus porras. De acuerdo a lo que vemos parece que queda claro que se está haciendo algo mal: o bien el policía infiltrado actúa de forma violenta y por eso le detienen o bien la policía realiza detenciones de forma arbitraria de gente que no es violenta. En cualquier caso, el modo de actuar de unos u otros policías sería ilegal.

A todo esto hay que añadir que los antidisturbios mantienen oculto permanentemente su número de identificación, al contrario de lo que ordena el reglamento (*).
 
 Evidentemente, esta medida está pensada para, entre otras cosas, evitar abusos y tampoco tendría importancia su incumplimiento si estos no se dieran. En el video siguiente puede observarse a un ciudadano que exige a un agente que le golpeó que se identifique, porque cree haber sido víctima de una agresión injustificada. Finalmente, a pesar de su insistencia, o precisamente por ella,  lo único que recibe es algún golpe más.
En definitiva, no creo que pueda calificarse de "ejemplar" la actuación de gran parte de los antidisturbios que intervinieron el 25S.

(*) En la primera versión se incluía una fotografía de antidisturbios alemanes con distintivos de identificación en grandes letras en la espalda (foto). Sin embargo, eliminé la referencia a Alemania ante la falta de homogeneidad de la policía alemana en sus métodos de identificación y la duda que plantea Pirri en su cometario sobre que el número no es el personal del agente sino el del grupo (en algunos casos es así, no sé si en la foto mencionada sucedía igual).



domingo, 18 de marzo de 2012

Reforma Laboral 2012: los porqués de una huelga general.


¿Cuáles son las principales razones para que la última Reforma Laboral sea merecedora de una huelga general? Por lo que se puede leer en el decreto correspondiente, se diría que hay bastantes:

Abaratamiento y facilidad para el despido:
Lo que básicamente todo el mundo sabe es que despedir a un trabajador será más barato y más fácil aún que con la reforma del gobierno anterior (a pesar de todo lo que dijo el PP entonces). Pero ¿Hasta qué punto cambia la situación? Si leemos con rigor la norma, las cosas empeoran más de lo que parece para el trabajador.
  • En principio, lo más visible es que la indemnización máxima (cuando el despido es improcedente) pasa de 45 a 33 días por año trabajado y el máximo que se puede cobrar pasa de 42 a 24 mensualidades. Pero hay mucho más que esta rebaja.
  • Si el empresario presenta el despido como procedente, el trabajador debe ir juicio para demostrar que no lo es y así intentar cobrar esos 33 días por año. Esto ya supone un cambio importante y una ventaja para el empresario, puesto que, según la nueva redacción de la ley, el que debe aportar pruebas de la improcedencia del despido es el trabajador cuando antes era la empresa la que debía probar que el despido era procedente. Por tanto, ahora el despido será procedente salvo que el trabajador demuestre lo contrario metiéndose en juicios.
  • Además, si la sentencia es a favor del empleado (declarando el despido como improcedente) el empresario ya no está obligado a pagar los salarios correspondientes al tiempo que pasó desde la fecha del despido hasta la sentencia. En estas condiciones, la mayoría de las empresas intentarán hacer pasar todos los despidos por procedentes. Así no tienen nada que perder, ya que si el trabajador los lleva a juicio sólo pagarán los 33 días/año. Si el empleado no quiere líos y no los lleva a juicio, ni eso.
  • Pero lo triste es que incluso este despido rebajado de 33 días va a ser difícil de conseguir porque se va a generalizar la aplicación del llamado despido objetivo, que tiene una indemnización de 20 días por año trabajado con un máximo de 12 meses. Para conseguir esto, el empresario ahora sólo necesitará decir que hay causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. Si opta por decir que las causas son económicas no es necesario tener pérdidas en la empresa, basta con ajustar la contabilidad para decir que se prevén pérdidas en el futuro o que hay un descenso de ingresos durante los últimos 3 trimestres (lo que no implica necesariamente que haya  ni pérdidas ni un descenso de ganancias). Si las causas alegadas son técnicas, organizativas o de producción basta con cualquier cambio en la maquinaria, el sistema de trabajo o la demanda de los productos o servicios que ofrece la empresa. Más fácil no se lo pueden poner para que sea este despido baratísimo la modalidad generalizada.
  • El despido objetivo de 20 días con un máximo de 12 meses puede usarse también para un despido colectivo o cualquier tipo de ERE, alegando las causas técnicas, organizativas, de producción o de bajada de ventas que se comentan en el punto anterior. Como vemos, será facilísimo poner cualquier disculpa para despedir a todos los empleados que el empresario desee. Pero es que además, no será necesario que el ERE sea autorizado por la autoridad laboral, basta con comunicárselo a los trabajadores. Es decir, se supondrá de mano que las causas que aduce el empresario son válidas. Serán los trabajadores los que deberán llevar a juicio a la empresa si no están de acuerdo.
  • Todo lo dicho sobre el despido objetivo será válido también para el personal laboral del sector público. De hecho pretende ser utilizado para el famoso "redimensionamiento" del sector público que pregona el gobierno.
  • Además, ahora se podrá despedir a cualquier trabajador que falte al trabajo 9 días en 2 meses o a aquel que falte 21 días en 4 meses de un año. Da igual que sean bajas justificadas por un médico, que si esas bajas son de menos de 20 días consecutivos pueden ser causa de despido objetivo (20 días/año con un máximo de 12 mensualidades). Da igual que la empresa no se haya visto perjudicada por la ausencia o que no esté pasando una mala situación económica, basta con que te pongas enfermo para que encima al empresario le salga más barato despedirte.
  • Otra de los cambios más escandalosos es que el despido libre y gratuito será posible en las empresas pequeñas durante el primer año. Y lo será gracias al nuevo tipo de contratos creado para las empresas de menos de 50 trabajadores (la mayoría en España). Cualquier trabajador que firme un contrato supuestamente indefinido en una pequeña empresa tendrá un periodo de prueba de un año. Esto significa que durante ese año o justo al acabar el mismo el despido será totalmente gratuito y sin necesidad de justificación alguna.
Empeoramiento generalizado de sueldos y condiciones de trabajo:
Por lo que se puede extraer del texto del decreto, no hay duda de que las condiciones de trabajo y los sueldos irán a peor. Pero ¿Cómo conseguirá esto la reforma? Pues acabando prácticamente con los convenios colectivos, que son los que venían fijando unas condiciones y sueldos mínimos. Ahora se dará libertad al empresario para fijar las condiciones y, lo que es peor, para cambiarlas cuando desee. Veamos:
  • Se dará prioridad total a los convenios de empresa sobre los convenios de sector. Estos convenios ya tenían prioridad gracias a la reforma de junio de 2011 (aprobada por el partido que dice llamarse socialista y obrero) sólo que ahora los convenios sectoriales no podrán fijar excepciones. Esto quiere decir que en cualquier empresa el dueño podrá sentarse con los trabajadores a fijar las condiciones de trabajo o sueldos mínimos y crear su propio convenio. Da igual lo que diga el convenio colectivo del sector. Imagínense qué poder de negociación tienen la mayoría de trabajadores de este país, que trabajan para empresas pequeñas y medianas y además ahora pueden ser despedidos por un precio módico: "o firmas esto o... ya sabes lo que te queda".
  • Cualquier convenio colectivo caducado no seguirá en vigor si a los 2 años no se llegó a un nuevo acuerdo. Esto significa que las condiciones mínimas para los empleados serán las del Estatuto de los Trabajadores: 650 €/mes, 40 horas semanales, 30 días naturales de vacaciones, 1,5 días de descanso semanales, etc. ¿Les parece a partir de ahora que la patronal va a poner mucho empeño en negociar con los sindicatos para firmar nuevos convenios? No lo creo.
  • Por si esto fuera poco, la empresa podrá saltarse el convenio (ya sea de sector o de empresa) e incluso podrá incumplir el contrato de trabajo o cualquier acuerdo posterior con el trabajador. Esto significa que el empresario podrá cambiar cualquier condición de trabajo del empleado, incluyendo el sueldo. Únicamente tendrá que aportar alguna razón económica, técnica, organizativa o de producción. Es decir: cualquier excusa valdrá. ¿Qué puede hacer el empleado?: aceptarlo o irse a la calle cobrando 20 días por año trabajado con un máximo de 9 mensualidades. Como siempre, se presupondrá que la empresa es la que hace las cosas bien, así que si el trabajador considera que sufre un abuso deberá ser él quien lo denuncie y aporte las pruebas de que el empresario da razones falsas.
  • El punto anterior es válido también para un grupo de trabajadores o para la empresa completa. Por tanto, el empresario podrá saltarse el convenio o incumplir los contratos con toda la plantilla si lo desea.
  • Por si faltaban medios para saltarse los acuerdos, la reforma también plantea la posibilidad de que el empresario proponga a los representantes de los trabajadores de la empresa no aplicar el convenio correspondiente  alegando causas económicas, técnicas, orgenizativas o de producción. ¿Qué creen que sucederá en esa negociación en las empresas pequeñas, cuando la mayoría ni siquiera tienen representación de los trabajadores? Pues que se dirá amén a lo que diga el jefe. Además, teniendo en cuenta todo el poder dado al empresario en los dos puntos anteriores no les hubiera hecho falta plantear esto.
  • Aparte de todo lo anterior, se incluye también la posibilidad de firmar contratos de formación y aprendizaje hasta los 30 años, teniendo estos como retribución mínima el salario mínimo interprofesional. Estos contratos podrán encadenarse indefinidamente (hasta los 30 años) sólo con decir que en la empresa te están formando para una actividad diferente.
Medidas perjudiciales para los parados:
Existen otras medidas que suponen recortes de derechos para los trabajadores pero, para no alargar en exceso el análisis destacaremos otras que llaman la atención por sus efectos negativos sobre aquellos que buscan un empleo:
  • El contrato creado para las pequeñas empresas (aquel que decíamos que permitía el despido libre el primer año) permite al trabajador cobrar el 25% de la prestación por desempleo. O, lo que es lo mismo, permite que el empresario pague el 75% de lo que quiere que cobre el empleado y este complete el sueldo con la prestación. Por si esto fuese poco, cuando se contrata a una persona que está cobrando prestación, la empresa puede deducirse de sus impuestos durante el primer año el 50% de lo que estaba cobrando el parado. Todos estos regalos al empresario servirán para que se contrate primero al parado que menos lo necesita: el que aún tiene prestación por desempleo. Aquellos que no tengan ni trabajo ni prestación difícilmente serán contratados por pequeñas empresas.
  • Los parados que están cobrando prestación podrán ser requeridos para realizar trabajos para la comunidad, perdiendo el derecho a la prestación por desempleo si no aceptan. Esta medida increíble fuerza al parado a trabajar gratis y a la vez elimina la posibilidad de cubrir esos puestos con trabajadores no esclavos.
  • Las Empresas de Trabajo Temporal pasarán a trabajar también como agencias privadas de colocación colaborando con el servicio público de empleo. Por tanto, rechazar 3 empleos propuestos por una ETT también será  razón para que te quiten la prestación. 
Resumiendo, esta es una reforma que servirá para bajar sueldos, empeorar condiciones de trabajo, facilitar el despido, restar derechos a trabajadores y parados y aumentar el número de contratos basura. Todos estos regalos a la patronal intentan justificarlos desde el gobierno afirmando que crearán empleo a largo plazo. Lo cual es una gran mentira, puesto que los empresarios contratan sólo cuando lo necesitan (al margen de reformas laborales). El problema es que las empresas sólo necesitan nuevos trabajadores si venden más. Por el contrario, con esta reforma, como los sueldos tenderán a bajar el consumo descenderá más aún que ahora. Al final, el efecto real de la reforma laboral sobre el número de parados será el contrario al que nos dice el gobierno del PP, y lo saben.

    sábado, 28 de enero de 2012

    Las mentiras en la prensa para defender los conciertos educativos

    Ante la aparición el pasado 24 de enero en el diario asturiano La Nueva España de una noticia titulada “La concertada le sale barata al principado” que aparecía en su portada en papel como “Un alumno de la concertada le cuesta al principado casi tres veces menos que uno de la enseñanza pública”, me decidí a echar algunas cuentas para comprobar lo que parecían evidentes contradicciones, números exagerados por error o, directamente, mentiras.
    La primera contradicción clara es que en la noticia se afirma que “por cada euro que la administración regional invierte en la enseñanza privada concertada, destina 2,5 a la pública”. Si antes se nos dijo que un alumno de la pública cuesta el triple que uno de la concertada ¿Cómo es posible que sólo se gaste dos veces y media más en la educación pública? La única solución para que cuadren las dos afirmaciones es que en Asturias haya más alumnos en colegios concertados que en los públicos, lo cual es evidentemente falso. En ninguna comunidad autónoma es mayoritaria la enseñanza concertada, como se puede ver en los datos del ministerio.

    Por otra parte la noticia comienza diciendo que “el Principado invertirá este año 3.083 euros por alumno de la concertada” mientras que se nos dice que en la enseñanza pública se gastan “ocho mil euros por año y alumno”. Veamos cómo obtiene el periodista estos números:

    Los costes, tal y como se dice en la noticia, se extraen del proyecto de presupuestos del Principado de Asturias 2012. En el detalle de gastos de la Consejería de Educación y Universidades hay 8 partidas destinadas a los centros concertados y todas ellas suman algo más de 98 millones de euros tal y como dice el texto de La Nueva España (exactamente 98.332.264 €). Estas 8 partidas se corresponden con gastos de personal y funcionamiento de centros concertados de régimen general no universitario. Esto son centros de educación infantil y primaria, de educación secundaria, de educación especial y de formación profesional. En la noticia de LNE se dice que esos colegios privados concertados imparten enseñanza a 31.889 alumnos. Ese número exacto se obtiene del documento “Estadística de la Enseñanza en Asturias Curso 2009-2010”  restando al total de alumnos de la concertada los correspondientes a educación de adultos. Si dividimos el coste de la concertada entre los alumnos mencionados se obtienen 3083 € por alumno y año, exactamente lo que dice el artículo.
    El problema viene cuando intentamos rehacer estas mismas cuentas con la enseñanza pública. Si se suman los conceptos “gastos de personal” y “gastos en bienes corrientes y servicios” de la enseñanza infantil y primaria con los de la secundaria, especial y formación profesional, como se hizo para la educación concertada, se obtiene un total de 443 millones de euros (443.076.233 €). Si se cuentan los estudiantes de la enseñanza pública correspondientes salen 89.746 alumnos y al dividir se obtienen 4937 € por alumno y año, no 8000.

    Esto implica que el gasto por alumno de la enseñanza pública es 1,6 veces el gasto por alumno de la concertada y no 3 veces como dice el titular de la noticia. No me parece que el 37,5% de ahorro que se obtiene en la enseñanza concertada sea algo significativo. Máxime teniendo en cuenta que la enseñanza pública da servicio a toda Asturias y tiene que mantener aulas con 5 alumnos en los colegios de las zonas rurales, mientras que, como se afirma en el artículo, la enseñanza concertada está presente sólo en las zonas más pobladas (19 de 78 concejos). Incluso la propia noticia reconoce que la enseñanza pública asume la educación de la mayoría de alumnos con necesidades especiales. Además, el periodista, en su afán por defender la rentabilidad de la educación concertada, da datos que indican que los profesores de la concertada trabajan más horas por menos dinero y deben dar clase a más alumnos por aula. Así, que la concertada sea sólo un 37,5% más barata por alumno sólo se explica por los beneficios empresariales que obtienen los colegios privados concertados.

    Entonces ¿Cómo hizo las cuentas el periodista de La Nueva España? ¿Cómo puede decir que el coste de la enseñanza pública es de 8000 euros por alumno y año? Sencillamente tomando el presupuesto completo de la Consejería de Educación y Universidades que ronda los 799 millones de euros (799.070.807 €) y restándole el dinero público dedicado a la enseñanza concertada. Si dividimos los 700 millones resultantes entre el número de estudiantes de la enseñanza pública no universitaria de régimen general obtenemos 7808 € por alumno, cifra que La Nueva España redondea a 8000. Todo esto es una evidente manipulación ya que en los números de la enseñanza pública están contabilizando: el coste de la Universidad de Oviedo, las escuelas de idiomas, las enseñanzas artísticas (conservatorios, escuelas de teatro, etc.), los servicios complementarios de transporte, comedores, ayudas para libros y material, la formación del profesorado, la construcción de infraestructuras y la propia administración de la consejería. Así, todo lo añaden como gasto de los alumnos de infantil, primaria, secundaria y FP para prácticamente multiplicar por dos los costes de la enseñanza pública.

    En definitiva, una vergonzosa mentira que aparece en portada del diario y en una noticia que toma partido a favor de los conciertos educativos de principio a fin. Todo para justificar las intenciones del gobierno asturiano de aumentar un 10% el dinero destinado a los conciertos mientras prácticamente se congelan o disminuyen el resto de partidas de educación. Además, me temo que esta falsedad nunca será rectificada puesto que ni tan siquiera han publicado en el apartado de “Cartas de los Lectores” un mensaje de trescientas palabras en el que les hacía ver lo evidente de su manipulación intencionada de las cifras. Por supuesto, los comentarios similares que hice a la noticia en la web del periódico también fueron censurados por el moderador.

    Cualquiera puede comprobar que las noticias similares son frecuentes en los medios del grupo Editorial Prensa Ibérica desde hace un tiempo [ej.1], [ej.2] y todas ellas falsean los números del mismo modo para así justificar la rentabilidad de los conciertos. Pero no son los únicos. El diario La Razón presentó datos para toda España el pasado 26 de octubre titulando: “Estudiar en la pública cuesta el doble que en la concertada”. Esta noticia reproduce directamente los números presentados por la patronal de la enseñanza privada y concertada CECE en su informe “Indicadores de la Libertad de Educación en España 2011”. Evidentemente, para obtener esos resultados la CECE manipula las cuentas del mismo modo que La Nueva España, sólo que con los datos de presupuestos de 2011.